Es relevante conocer los motivos sobre el deterioro, con el objetivo de obtener las mejores soluciones a cualquier obra de albañilería.

El deterioro general de las obras de albañilería se debe fundamentalmente al ascenso del agua que los materiales de construcción llegan a absorber debido a la capilaridad. Es un fenómeno que llega afectar a los edificios civiles y sobre todo al patrimonio monumental.

Los motivos fundamentales de la humedad de capilaridad ascendente son la presencia de agua en el terreno en el que se ubica y también la capilaridad que caracteriza a los materiales de construcción, se pone de manifiesto sobre todo en forma de manchas en la base de las paredes. Por eso la pintura se resquebraje, que el enlucido llegue resquebrajarse. El agua asciende por los canales microscópicos de los capilares debido a la poca tensión superficial, este fenómeno se agrava cuando existen sales disueltas en el terreno o en los materiales de construcción. Por eso se producen además de los daños estéticos, la humedad asciende multiplica la dispersión del calor desde el mismo interior. Esto además de provocar daños estéticos provoca problemas de carácter medioambiental y también higiénicos.

Las barreras químicas obstruyen los poros e hidrofugan las paredes de los capilares.

Efecto hidrofugante en obras de albañilería tratadas con la formulación TRX 118 de DryKit:

 

La humedad es la aparición de forma incontrolada del agua, también vapor de agua, que llega a superar el porcentaje normal ya que posee un material o elemento constructivo.

La humedad se divide en:

1. Humedad de filtración

Aparece como consecuencia del agua que procede del exterior hacia el interior. Si atendemos a los sótanos, lo más probable es que nos podamos localizar con que el agua traspasa el muro del mismo sótano desde el exterior hacia el interior se manifiesta al final en forma de manchas y llega a alcanzar revestimientos, hinchamientos o eflorescencias de sales la razón fundamental son reacciones químicas con los componentes presentes en el muro.

Cuando acaba el periodo de secado cabrá la posibilidad de restablecer los guarecidos y así se evitan los problemas que antes describíamos y podremos aplicar hasta revestir al completo los muros la mezcla de los productos TRH 745 + TRB 305. También se puede añadir un desecante en formato concentrado que se denomina TRH 780, con el objetivo de alcanzar un mortero de rehabilitación en contra de la humedad.

Para eliminar este tipo de problemas, desde Tecnored se ha propuesto el sistema “Inietta&Impermeabilizza”, este sistema se aplica con una inyección que funciona con una bomba de presión de un producto (TRH 777 + TRG 301), que se basa en bentonitas sódicas modificadas, su objetivo es la creación de una burbuja de carácter sólido entre el muro y el terreno que llegue a impedir la filtración de agua a través de él. Este sistema será aplicado en breve en España por Demsa, tras comprobar los resultados óptimos que se genera en Italia.

2. Humedad de capilaridad

Este tipo de humedad afecta a prácticamente todos los edificios antiguos, en algunos casos a algunos de nuevas construcción si en ese caso carecen de sistemas de aislamiento adecuados.

Si la humedad asciende por las paredes, a través de los capilares, estaremos en presencia de humedad por capilaridad, se verá cuando a través los capilares de escaso diámetro, alcanzando distintas alturas se manifiestan como una aureola que será más oscura en cuyo borde se apreciarán eflorescencias, también abultamiento o disgregación del material (como pueden ser piedra, ladrillo, etc). Se diferencia del resto de los tipos de humedades manifestándose en una sola franja y nunca en forma discontinua. Generalmente el borde superior es de forma irregular y también crece en altura a medida que el muro es más ancho.

Causada por la presencia de agua en el terreno y también por la capilaridad de los materiales, la humedad ascensional afecta a los edificios. Los canales microscópicos de los capilars del muro debido a la poca tensión superficial son los que permiten esta subida de agua, que aumentará más si en los materiales presentes en el terreno hay sales disueltas.

Para solucionar los problemas generados por éste tipo de humedad Demsa ha propuesto el Sistema DryKit® a través de la aplicación de una serie de formulaciones que podríamos resumir en dos grupos, por un lado, las formulaciones en disolvente TRS 114 y TRF 135, cuya ventaja respecto a las soluciones acuosas es la reducción considerable de los tiempos de secado, y por otro lado, las formulaciones en agua TRE 128 y TRX 118, cuya composición permite su aplicación incluso en edificios habitados, ya que pueden volver a utilizarse los locales al día siguiente de la realización del tratamiento desecante.

3. Humedad de condensación

Este tipo de humedad es el resultado de la retención del vapor de agua en los capilares tanto de muros, paredes o también revestimientos debido a la variación de la presión en el interior con respecto al exterior. De forma general, esto se manifiesta en forma de colonias de hongos (que son las manchas negras que vemos) también en forma pequeñitas gotas (es igual como si transpirara la pared) también como se ampolla la pintura. Para solucionar éstos problemas se puede utilizar el producto TRM 600, un antibiótico cuya función es esterilizar las superficies contaminadas, preparando perfectamente el ambiente para las intervenciones posteriores que eliminen sus causas.

 

El nivel freático

El nivel freático del terreno es muy fácil de conocer ya que sencillamente es el acceso del agua al cimiento del muro. Si está llega el caso en el que está próximo al arranque o tal vez en su misma cota tiene bastantes posibilidades que durante el ascenso del agua a través del muro se haga de forma rápida y también sencilla. Por otro lado si está por debajo del nivel tendrá un poco más de dificultad en el ascenso, esto irá en relación directa a la distancia del nivel freático también al tipo de terreno sobre el que se asiente el edificio. el agua viajará entonces por dos tipos de capilares distintos, los del terreno y también por los del edificio.

El nivel freático puede variar además de forma constante dependerá de las lluvias, también de las variaciones estacionales. Puede ocurrir que durante mucho tiempo no aparezca ninguna variación en el nivel freático y de repente aparezcan manchas que indiquen este problema. Una de las causas posibles es la realización de algunas obras en aquellas zonas que están cerca y que han variado estratos del terreno y permiten el paso del agua.

Aguas exteriores

Aquí podemos señalar que cuando se recoge el agua de las calles de las poblaciones, se hace en función de un estudio que está realizado para evacuar la misma sin tener en cuenta el lugar por el que pasa. Por eso nos encontramos con aceras y también canalizaciones que hacen que discurra el agua por el pie del edificio, a veces si falla el cálculo, se queda estancada en nuestra fachada y eso provoca problemas de humedad en las casas.

También puede encontrarse agua que salpique por la lluvia, se supone que debido a roturas. En definitiva, cualquier tipo de agua que viene por causas naturales y que discurre por esas zonas.

Aguas interiores

Las aguas interiores son las mismas de las que hablábamos antes. En principio no tienen que tener ningún problema pero tiene que estar todo bien calculado. Existirán problemas si hay algún tipo de rotura en la canalización. El problema viene en el momento en el que produce algún tipo de rotura de la canalización. Se denomina entonces humedad accidental.

La solución más acertada será la reparación de la avería, en caso necesario una desecación apropiada.

Efecto chimenea

La tierra está todo el rato transpirando y expulsando el agua que absorbe en forma de vapor de agua.

Esta agua expulsada puede venir de cotas muy bajas y por medio de la capilaridad natural ascender hasta el nivel del suelo. Cuando el ser humano por medio de sus obras corta este proceso, el agua busca una salida. Esto ocurre por ejemplo cuando asfaltamos una zona que antes estaba al aire libre. Al cortar la transpiración natural el agua del interior busca una salida y la encuentra en los cimientos de los edificios colindantes que al ser material poroso el agua que antes se evaporaba en la calle ahora asciende por el muro del edificio haciendo el efecto chimenea. Hay bastantes casos demostrados en los que se ha notado el aumento de humedad en un edificio después de haber asfaltado la calle.

Daños higiénicos

Cuando el ambiente está húmedo es el momento perfecto para que se formen los hongos los cuáles algunos son muy peligrosos. El agua se evapora se y transfiere a la atmósfera del local creándose de este modo una humedad relativa demasiado alta, peligra entonces la situación higiénico ambiental que es totalmente negativo para las personas que trabajen o vivan en ese tipo de ambientes y se pueden generar problemas respiratorios. No se puede olvidar que el muro cuando está húmedo crea problemas de asilamiento térmico. El muro húmedo si lo comparamos con el seco, pierde entre el 30 y el 50% del poder aislante.

Daños estructurales

Los muros se degradan por la humedad con el paso de los años, esto si lo consideramos de forma extrema puede comprometer la estructura del edificio. Se comienza el proceso de degradación con el agrietamiento de la pintura, después es el turno del abombamiento de los guarecidos para llegar a la desintegración del ladrillo o también la piedra. De forma constante va aumentando y disminuyendo el volumen, es decir, llena y vacía los capilares provocando el agrietamiento y embolsamiento de la pintura y el guarecidos y por eso se produce el deterioro de las partes que forman el muro.

Daños estéticos

En un ambiente que está siendo atacado de mohos y también hongos se considera un ambiente enfermo. Cuando el guarecido está manchado de sales quiere decir que está deteriorado desde un punto de vista estético. En el caso en el que el guarecido haya sido manchado de sales, querrá decir que está completamente deteriorado, tan sólo se podrá solucionar el problema, eliminando la alimentación de la humedad.

No sirve para nada tapar esas manchas con pintura. Porque en poco tiempo las volverás a ver.